Ind. Química, base del crecimiento de la manufactura Mexicana

En 2019, representó el segundo sector industrial de mayor participación en el PIB con 2.1%, que significó un consumo anual de USD 42,000 millones, sin embargo, debido a la escasez de materias primas solo tuvo capacidad para atender 25% del mercado nacional de productos químicos, y este año a causa de la pandemia al mes de julio el consumo aparente cayó 12%.

 

Así lo dio a conocer José María Bermudez, presidente de la Asociación Nacional de la Industria Química (ANIQ), durante el LII Foro Nacional de la Industria Química, que se realizó de manera virtual.

 

El líder del sector solicitó a las autoridades federales trabajar en conjunto para lograr el abastecimiento de los diferentes insumos que hacen falta en el país. En su participación, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, aceptó las propuestas de la industria química y acordó reunirse con la ANIQ una vez al mes para avanzar en la solución a los problemas que enfrentan las empresas de este sector.

 

Actualmente la industria química en México tiene un déficit de USD 32.000 millones por importaciones, por lo que consideran clave para su reactivación, reducir la dependencia de las importaciones con proyectos concretos que involucran a la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex), que hoy atraviesa una situación difícil y no está en condiciones de abastecer al mercado nacional.

 

En el mismo evento, Luis de la Calle, director general de la consultora De la Calle, Madrazo, Mancera (CMM) y quien ha participado en las negociaciones para los acuerdos comerciales de México, aseguró que el país tiene todas las condiciones para convertirse en una potencia manufacturera mundial, donde la industria química será clave para ello.

 

“Si aumentamos la capacidad y complejidad de la industria química, ésta va a ser la base para el crecimiento de toda la industria de manufactura para que México pueda ser entonces la plataforma de exportación de América del Norte”, comentó en videoconferencia.

 

Señaló que el Plan de Infraestructura presentado la semana pasada por el gobierno de México, contempla varios proyectos químicos importantes, entre ellos una planta de fertilizantes, una planta de amoniaco, y una terminal para la importación de etano, lo cual refleja un cambio importante en la estrategia del gobierno.

 

En su opinión, México debe aprovechar que se encuentra en la región del mundo donde el de los energéticos son los más bajos del mundo, por lo que sugirió a las empresas químicas colaborar con el gobierno en el impulso de inversiones para este sector.

 

“América del Norte va a ser la región del mundo con la petroquímica más grande y más exitosa en los próximos años porque en esta región están los insumos más económicos del mundo y México tiene que convertirse en un país en donde no solamente estamos esperando que nos lleguen las órdenes de compra de Estados Unidos, sino que nos tenemos que convertir en un país en donde el sector privado proponga soluciones a Estados Unidos para competir exitosamente en todo el mundo y las posibilidades son enormes”, aseguró el analista.

 

Luis de la Calle hizo énfasis en que el país cuenta con ventajas que otros países no tienen, no solo estar en la región del mundo con el sector energético más vibrante, sino que es el único país emergente con la mayor cantidad de acuerdos comerciales con todas las regiones del mundo.

 

En particular, la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) ofrece oportunidades para todos los sectores industriales, por lo que el especialista consideró que las empresas y el gobierno deben concentrar los esfuerzos en trabajar en lo que hace falta para captar esas oportunidades.

 

Otra ventaja del país es que las empresas de manufactura globales están diversificando sus cadenas de proveeduría debido al alto riesgo que significa depender de China, por lo que en el futuro buscarán invertir en otros destinos y México puede ser una alternativa atractiva para ellas.

 

“México es una gran potencia industrial con poco gas, si tuviéramos mucho gas seríamos enormemente productivos y poderosos. Entonces necesitamos logística, energía barata, y en tercer lugar necesitamos tecnología”, afirmó De la Calle.

 

Y añadió que las empresas deben perder el miedo a invertir en tecnología y aprovechar que México es un país joven y apostar por formar a los mejores ingenieros del mundo, para transitar hacia una economía donde predomine la creatividad, las ideas y el conocimiento.